¿Qué es el Ladrillo de Lana?
Es un material de construcción compuesto por una mezcla de lana de oveja y arcilla. La lana se añade a la mezcla de arcilla durante el proceso de fabricación, lo que resulta en un ladrillo más ligero y con mejores propiedades aislantes. Esta innovación se inspira en técnicas tradicionales y busca mejorar la eficiencia energética y la sostenibilidad en la construcción.
La propuesta consiste en utilizar estos ladrillos de lana como material constructivo en las fachadas y tabiques interiores de las viviendas.
De esta forma se consigue maximizar el aislamiento térmico y acústico sin necesidad de colocar aislamiento adicional. Esto simplifica el proceso de construcción, reduciendo costos y plazos. ¿Qué significa esto? Más eficiencia económica y ecológica.
Ventajas del ladrillo de lana:
- Mejoran la resistencia de los ladrillos a la compresión, minimizan las fisuraciones y deformaciones por contracción, reducen el tiempo de secado, y aumentan su resistencia a los esfuerzos de flexión.
- Es una alternativa más sostenible y saludable que los materiales de albañilería convencionales, como la arcilla cocida y los bloques de horimgón.
- 37% más resistente que otros ladrillos de tierra estabilizada, sin cocer.